Nivel 2: Un Paso Atrás en la Conduccion Autonoma en España
¿Te imaginas un futuro en el que los coches conducen por sí mismos? La conducción autónoma es una realidad, pero en España, nos quedamos atrás en comparación con otros países. En este artículo, te explicaremos por qué estamos estancados en el Nivel 2 y cuáles son las implicaciones según ANFAC. Prepárate para descubrir los desafíos que enfrentamos y cómo podríamos avanzar hacia un futuro de coches totalmente autónomos. ¡Sigue leyendo!En un mundo donde la tecnología avanza a pasos agigantados, los vehículos autónomos se vuelven cada vez más comunes. Sin embargo, en España, aún no hemos superado el Nivel 2 de conducción autónoma. Esto significa que aunque nuestros coches pueden realizar algunas funciones de conducción por sí mismos, el conductor debe mantenerse alerta y listo para intervenir en cualquier momento.
Diferencias en Europa: Francia y Alemania a la Vanguardia
En contraste, nuestros vecinos europeos, como Francia y Alemania, han dado pasos significativos en la adopción de la conducción autónoma.
Francia considera el Nivel 3 como un sistema de ayuda a la conducción y lo permite.
Mientras tanto, Alemania ha permitido el Nivel 3 desde 2017 y ha introducido funciones de Nivel 4 en áreas específicas del tráfico en 2021. El Nivel 4 permite que el coche se guíe prácticamente sin intervención humana en su área designada.
ANFAC Llama a la Acción en España y Futuro de la Conducción autónoma
La Asociación Española de Fabricantes de Automóviles y Camiones (ANFAC) ha expresado su preocupación por la falta de avances en la regulación de la conducción autónoma en España. ANFAC insta a las autoridades a modificar el Reglamento General de Circulación y otras normas para permitir la circulación de vehículos con Nivel 4 de autonomía en nuestras carreteras. Argumentan que España tiene un potencial significativo en la industria automotriz europea.
Aunque España dio un primer paso con la nueva Ley de Tráfico de 2022, el progreso se ha estancado desde entonces. La incertidumbre política tampoco ha ayudado. ANFAC y otros defensores de la conducción autónoma enfatizan la necesidad de una acción decisiva por parte de la Administración para adaptar el marco normativo y permitir la circulación de vehículos con funciones de conducción totalmente automatizadas hasta el Nivel 4.
En resumen, España enfrenta desafíos en la adopción de la conducción autónoma, quedando en el Nivel 2 mientras otros países avanzan hacia la autonomía total. Para que el coche autónomo se convierta en una realidad en nuestras carreteras, es crucial que las autoridades tomen medidas decisivas. El futuro de la conducción autónoma en España depende de ello.
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